Bienvenidos a bordo del curso de TCP

Señoras y señores lectores, bienvenidos a bordo de esta experiencia del blog de Air Hostess.
Laura y Ángel, compañeros de AH MAD-314, curso que acaba de obtener el certificado de tripulante, quisiéramos compartir nuestra experiencia con el resto de Air Hostess y futuros TCP’s. Esperemos que disfruten de nuestras vivencias.
Todavía recordamos cuando entramos por primera vez a esa pequeña aula blanca, aún sin estrenar, llena de completos desconocidos; caras nuevas que no sabíamos que a día de hoy pudieran ser tan importantes en nuestras vidas, cada uno con su estilo y personalidad propios todavía por descubrir. 
Todo cambió cuando al día siguiente fuimos todos uniformados, con infinidades de fallos que gracias a nuestra directora Carmen, pudimos pulir día a día.
La mayoría de nosotros, no teníamos ni idea de qué nos esperaba tras la puerta, ¿mercancías peligrosas? ¿Qué es eso?
Tan sólo yo, Laura, podía llegar a imaginarme cómo iban a funcionar las cosas, ya que fui TCP de Vueling hace 8 años, pero se me caducó la licencia y Air Hostess me brindó la oportunidad de volver a obtenerla, ya que mi pasión es volar.
Sin embargo, yo, Ángel, igual que el resto de mis compañeros, no sabíamos en absoluto a qué nos estábamos enfrentando: la importancia de los procedimientos, la seguridad, el material de emergencia y de lo necesario que es la figura de un TCP a bordo. 
Gracias a la constancia que nos imponían en la escuela hemos conseguido aprobar tanto los exámenes internos como el de AESA con una nota superior a 90%.
Señores pasajeros, les agradecemos que hayan volado con nosotros hasta Coruña, nuestra meta. Después de 3 meses de esfuerzo y entrenamiento con las pruebas físicas, lo que parecía tan lejano, apareció en nuestro camino de la noche a la mañana, cual viaje transatlántico. 
Les rogamos permanezcan sentados tras las horas de simulador, clases teorico-prácticas de medicina, sesión de fotos, extinción de fuegos y prepárense porque… ¡saltamos por la rampa!
Además tendrán tiempo para disfrutar de la gastronomía gallega y de su fantástico entorno, un viaje que sin duda nosotros volveríamos a repetir, eso sí, sin tener que volver a examinarnos.
Hemos compartido experiencias muy buenas y todos coincidimos en que ha sido un curso y un viaje muy duros, pero nos quedamos con una grata experiencia y muchas ganas de volar.
Esta tripulación coincide en que AH nos ha inculcado: perseverancia, compañerismo y dedicación. 
Antes de desembarcar nos gustaría agradecer a todos nuestros profesores los conocimientos que nos han transmitido, tanto a nivel personal como a nivel profesional. También animamos a todos aquellos que estén pensando en hacer el curso a que den el paso de iniciarse en este increíble mundo que es la aviación.