Yolanda, una historia de perseverancia y sueños cumplidos

La historia de Yolanda es la de una joven malagueña de 23 años que, tras finalizar sus estudios de Sociología en la Universidad de Granada, decidió dar un giro a su vida para perseguir su verdadero sueño: convertirse en Tripulante de Cabina de Pasajeros (TCP)

De la sociología a los cielos

Yolanda siempre había visto el trabajo de azafata como algo casi inalcanzable, pero su pasión por volar y su deseo de formar parte de la tripulación de una aerolínea la llevaron a dar el paso. "Al terminar la carrera, sentí que no me llenaba y decidí perseguir mi sueño de volar", cuenta. Así comenzó su búsqueda de la mejor formación para lograrlo.

Air Hostess Málaga: el comienzo del viaje

Después de valorar distintas opciones en su provincia, la visita a la academia Air Hostess Málaga fue decisiva. Yolanda encontró en la escuela la motivación y el respaldo que necesitaba para comenzar su camino en la aviación. "Fueron dos meses muy intensos pero que recuerdo con mucha felicidad", afirma con una sonrisa.

Un camino rápido hacia el cielo

Su preparación fue rápida pero efectiva. Yolanda realizó el curso de TCP de noviembre a diciembre de 2023, y tan solo una semana después ya estaba enfrentándose a su primera entrevista de trabajo. Aunque en esa ocasión fue rechazada en el psicotécnico, no se dejó vencer por el desánimo. En enero de 2024 tuvo su segunda oportunidad con Volotea, su actual compañía, y tras superar el proceso de selección comenzó el curso de conversión en abril de 2024. Desde junio, no ha parado de volar, convirtiéndose en una profesional destacada.

Consejos para los futuros TCP

Para Yolanda, el principal consejo para quienes aspiran a seguir sus pasos es claro: "Sé tú mismo y siempre ponte en el lugar del otro, tanto en las entrevistas como trabajando". Además, anima a no dejar de formarse y revisar los manuales, y nunca sentir vergüenza de preguntar cuando surgen dudas.

Historias entre nubes

La vida como TCP está llena de momentos inolvidables. Yolanda confiesa que no podría elegir una sola anécdota porque hay muchos días buenos y algunos no tanto. Sin embargo, destaca la importancia de tener una buena tripulación. "Incluso en los días más nublados, si tienes una buena crew, sientes felicidad por estar ahí con ellos".

Mirando al futuro con ilusión

El esfuerzo y la pasión de Yolanda han dado sus frutos. Recientemente ha pasado a ser jefa de cabina, un logro que la impulsa a seguir creciendo. Su próxima meta es convertirse en familiarizadora e instructora, porque considera que "no hay nada más bonito que compartir el conocimiento que tienes y ayudar a otros en su proceso de aprendizaje".

La historia de Yolanda es una muestra de que los sueños se pueden alcanzar con esfuerzo, formación y, sobre todo, ilusión por volar.

Desde Air Hostess, la acompañamos en cada despegue y aterrizaje, orgullosos de su evolución y sus logros.