En el emocionante mundo de la aviación, cada viaje tiene su propia historia única, y hoy te presentamos la de Rubén Cebrián, un joven de 20 años originario de Teresa, Castellón. Desde sus estudios de literatura francesa hasta su formación como Tripulante de Cabina de Pasajeros (TCP) en la nuestra escuela de Valencia y su actual experiencia en Ryanair, Rubén nos comparte su emocionante viaje y nos ofrece una visión única de la industria de la aviación.
"Hola, mi nombre es Rubén Cebrián y tengo 20 años. Soy de Teresa, una encantadora localidad en Castellón. Al acabar mis estudios de bachillerato, empecé un grado universitario de literatura francesa, pero al año siguiente decidí cambiar mi rumbo y opté por estudiar filología inglesa mientras estudiaba para ser TCP en Air-Hostess Valencia."
"Decidí formarme como TCP gracias a la recomendación de un amigo que ya tenía la licencia pero aún no había volado. Vi esto como una oportunidad perfecta para mejorar mis habilidades en idiomas, especialmente en inglés y francés. Además, siempre he sentido una profunda pasión por la aviación y los viajes, ¿y qué mejor trabajo para combinar mis intereses?" exclama Rubén entre risas
"Conocí Air-Hostess gracias a las redes sociales, donde descubrí que se trataba de una gran escuela a nivel profesional y social. Al unirme a Air-Hostess Valencia, confirmé que lo que había visto en línea era la realidad. Los profesores son excepcionales, y mis compañeros de clase se convirtieron en algunos de mis mejores amigos. Estudiar en Air-Hostess es una experiencia que recomendaría a cualquiera que desee formarse como TCP."
"Poco después de obtener mi licencia, comencé a enviar currículums a casi todas las ofertas que encontré (¡No os cerréis a nada!). En menos de un mes, recibí una llamada de Ryanair y pasé con éxito la entrevista, lo que marcó el inicio de mi carrera como TCP."
"El proceso de selección no resultó ser muy complicado para mí, ya que no tenía problemas para comunicarme en inglés, el idioma oficial de mi compañía. En cuanto al entrenamiento, fueron seis intensas semanas. Pasábamos nueve horas al día en clases, realizando exámenes y prácticas reales relacionadas con los procedimientos de la compañía. Mis conocimientos previos de Air-Hostess me dieron una ventaja."
"Llevo solo tres meses volando, pero uno de los días que siempre recordaré es mi primer día de trabajo. La sensación de euforia y entusiasmo por empezar a volar, además de sentirme libre en un puesto de trabajo poco común en el cual tu oficina cambia cada día, es algo que nunca olvidaré."
"En el futuro, me gustaría cambiar a alguna compañía de largo radio, ya que tengo mucha curiosidad por experimentar esos vuelos y esa forma de vida. Y como objetivo final, quiero sacarme la licencia de piloto comercial, pero de momento me siento muy bien como TCP."
"Sé que dar el paso hacia esta carrera puede ser un gran cambio en tu vida, pero estoy seguro de que, si sabes cómo llevarlo, puede llegar a ser el trabajo de tus sueños. Si tienes miedos comunes, como el inglés o el miedo a volar, no te preocupes. Todo eso se superará con la rutina y te irá genial."
La historia de Rubén Cebrián es un ejemplo inspirador de cómo perseguir tus pasiones y enfrentar desafíos puede llevarte a lugares sorprendentes en la industria de la aviación. Su determinación y entusiasmo son un recordatorio de que con dedicación y pasión, ¡puedes alcanzar tus sueños en las alturas!
En el emocionante mundo de la aviación, cada viaje tiene su propia historia única, y hoy te presentamos la de Rubén Cebrián, un joven de 20 años originario de Teresa, Castellón.
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